Día internacional de las Personas con Discapacidad
La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró, en 1992, el día 3 de diciembre: Día Internacional con las Personas con Discapacidad. El objetivo que la ONU persigue con este día es promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad en la sociedad, la vida política, económica y cultura.
Este 2020, la ONU focaliza el tema del Día Internacional de las Personas con Discapacidad en la «Participación y el liderazgo de las personas con discapacidad: Agenda de Desarrollo 2030», centrándose en su empoderamiento para un desarrollo inclusivo, equitativo y sostenible.
Desde Futuro Singular Córdoba, queremos realizar contigo la siguiente reflexión
¿De quién depende lograr el empoderamiento de las personas con discapacidad intelectual?
¿De la persona, del trabajo en los centros, de su familia, de la sociedad, de las instituciones?
El empoderamiento de las personas con discapacidad comienza desde el reconocimiento de que todas las personas tenemos los mismos derechos y obligaciones como ciudadanos y ciudadanas.
Capacitar a las personas con discapacidad intelectual, no pasa únicamente (aunque sí es fundamental) por la educación impartida en las aulas y núcleo familiar, sino también, por ofrecerles, a lo largo de todo su ciclo vital, herramientas y aptitudes para su desarrollo y el ejercicio sus derechos y ciudadanía plena.
En Futuro Singular Córdoba, trabajamos la capacitación y empoderamiento de las personas con discapacidad desde las edades más tempranas hasta la vida adulta. La educación en valores de respeto e igualdad entre hombre y mujeres, el desarrollo de su autonomía y autodeterminación y la capacitación para el empleo y la vida independente son los pilares fundamentales de nuestra fundación para el empoderamiento de las personas con discapacidad intelectual.
Pero ¿Qué sucede cuando una persona con discapacidad está empoderada y no puede ejercer su ciudadanía plenamente?
El desarrollo inclusivo, equitativo y sostenible que la ONU persigue este 2020 y que así lo ha integrado de forma transversal en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, pasa efectivamente porque instituciones, empresas y sociedad permitan y den cabida a este empoderamiento de las personas con discapacidad.
Las instituciones deben ser capaces de desarrollar una accesibilidad universal que ofrezca las mismas oportunidades a todas las personas. Deben así garantizar el acceso de todas las personas a la información y la formación, el acceso físico y cognitivo a edificios y servicios sociales, al empleo público y el acceso a la cultura y el ocio en las ciudades.
El empresariado, más allá del cumplimiento de la Ley de las Personas con Discapacidad, debe ofrecer oportunidades laborales a todas las personas basándose en sus capacidades y habilidades. Disponer de un trabajo estable y remunerado, es un requisito para alcanzar una vida independiente por lo que, la implicación del tejido empresarial en el desarrollo de las personas con discapacidad es fundamental.
La sociedad por su parte, cada uno de nosotros/as, tenemos un papel esencial para permitir el empoderamiento de las personas con discapacidad. El respeto, la empatía y la normalización de su participación en la vida social, económica y cultural sustituirán de nuestra mente el concepto de integración por el de inclusión.
En conclusión, de poco no nada sirve que, desde entidades como Futuro Singular Córdoba, trabajemos en la capacitación y empoderamiento de las personas con discapacidad si el resto de los agentes implicados en permitir y desarrollar esa autonomía no se comprometen en el proceso.
Instituciones, empresas y sociedad debemos asumir nuestro papel en la inclusión de las personas con discapacidad, desplegando los apoyos técnicos y naturales que sean necesarios para lograr la igualdad y el ejercicio de su plena ciudadanía.