Escuela Inclusiva de Verano: objetivos, programa y voluntariado
Resumen
La apuesta de Futuro Singular Córdoba por un espacio de conciliación, inclusión y aprendizaje en los meses de verano.
“Llega el verano, llegan las vacaciones y no sé que hacer con mi hijo/a”.
“Necesito conciliar mi vida laboral con atender las necesidades de mi hijo en las vacaciones de verano”.
“No encuentro escuelas o espacios donde llevar a mi hijo con discapacidad intelectual en verano y si las hay no tienen personal que los atienda”.
“Mi hijo/a es muy especial y necesita personas que sepan llevarlo”.
Estas y muchas otras frases, son las que escuchábamos (y todavía se escuchan en algunos rincones) en voz de familias al terminar el curso escolar, una voz de ayuda, de necesidad, de comprensión con una realidad que en Futuro Singular Córdoba bien conocemos.
Esta llamada de atención, de necesidad urgente, fue en su momento, la que nos impulsó a trabajar en un proyecto pionero en nuestra provincia a la hora de abordar el ocio y tiempo libre de las personas con discapacidad intelectual en verano.
PROGRAMA ESCUELA DE VERANO INCLUSIVA
Futuro Singular Córdoba apuesta, como plantea nuestra misión, por la transformación social, y uno de los mecanismos para lograrla es a través del programa de Escuela de Verano Inclusiva. Este programa permite que los/as niños/as (con discapacidad intelectual y sin ella) tengan un espacio donde aprender, convivir y tener actividades de ocio y tiempo libre compartidas durante las vacaciones de verano, y las familias puedan así, conciliar su vida personal y laboral.
No podrían ser espacios inclusivos si los niños y niñas con discapacidad no contaran con la atención específica que merecen (familias, voluntariado y profesionales especializados) para ser protagonistas de su ocio y tiempo libre en las vacaciones de verano, en un entorno comunitario, accesible, abierto. diverso y comprensivo.
OBJETIVO: LA INCLUSIÓN
Nuestra escuela de verano implica e impregna de inclusión al entorno socioeducativo donde se pone en marcha (Castro del Río, Córdoba y Palma del Río) y donde es prioritario, como proyecto, el desarrollo y alcance de estos objetivos:
- Garantizar el acceso de niños/as sin importar su condición personal, social, económica o cultural.
- Promover la igualdad de oportunidades para el aprendizaje, la participación activa y desarrollar sus habilidades.
- Fomentar un ambiente de aceptación y respeto donde se valore y se respete la diversidad y cada niño/a pueda sentirse valorado/a y desarrollar su identidad.
- Desarrollar el potencial de todos proporcionando herramientas y apoyos necesarios para que cada niño/a desarrolle su potencial independientemente de sus necesidades o capacidades.
- Fomentar la participación activa de los niños promoviendo la solidaridad y la cooperación entre ellos.
- Eliminar toda barrera para el aprendizaje y disfrute de las actividades a desarrollar.
- Adaptar y proporcionar los apoyos individualizados que se requieran para el acceso y participación.
- Fomentar la colaboración de los profesionales, voluntariado, familias, niños, etc., creando un entorno de ocio y aprendizaje solidario y enriquecedor.
- Desarrollar autonomía y responsabilidad.
- Promover la justicia social donde se respeten todos los derechos de los individuos y se brinden las mismas oportunidades.
EL VOLUNTARIADO COMO RECURSO HUMANO PRIMORDIAL
El voluntariado juega un papel primordial en este programa ya que es un recurso humano valioso que complementa la acción de los profesionales que organizan y desarrollan las actividades, y a los cuales se le brinda vivir una experiencia única, impulsando un aprendizaje activo e inclusivo.
El voluntariado participante proviene de ciclos formativos (integración social, animación socio cultural…) y del ámbito universitario (Grado de Educación Infantil y Primaria, Pedagogía, Psicología…) tanto de la provincia de Córdoba como de Málaga.
Al voluntariado, esta escuela, le supone una experiencia vital de enseñanza-aprendizaje, convivencia y formación personal y profesional en lo referente al acercamiento a la discapacidad intelectual y la puesta en marcha de estrategias socio-pedagógicas aprendidas en sus ámbitos de estudio y formación.
¿Qué beneficios supone tener este voluntariado?
No cabe duda que para el propio voluntariado supone un desarrollo personal, un aumento de la autoestima, inclusión social y la adquisición de nuevas habilidades y oportunidades de aprendizaje.
Para la entidad y para la escuela de verano, supone mayor diversidad de conocimientos y experiencias, una gestión más eficiente, una base de recursos humanos para otros proyectos o futuras situaciones laborales, una buena imagen, proyección en la comunidad, establecimiento de alianzas con los entornos etc.
Para la sociedad, mayor participación ciudadana, fortalecimiento de la cohesión social, reducción de la discriminación y promoción de una sociedad más justa e igualitaria, confianza en los proyectos socioeducativos inclusivos, educación en la diversidad, etc.
Y para los/as niños/as que participan en la Escuela de Verano, que son el alma de este proyecto, supone: acceso igualitario a actividades de ocio y tiempo libre; tener apoyos para la realización de cualquier actividad; experiencias de interacción social con personas que no son de su entorno inmediato; el depositar confianza en otra persona para su desarrollo personal, social y emocional; aumentar su autoestima y su autoconcepto; compartir experiencias enriquecedoras y constructivas; desarrollar conductas prosociales, etc.
En resumen, la Escuela de Verano Inclusiva supone levantarse cada día con una ilusión y con un objetivo principal y vital:
DISFRUTAR, APRENDER Y COMPARTIR ACTIVIDADES DE OCIO Y TIEMPO LIBRE, HACIENDO USO DE LOS RECURSOS Y ATENCIÓN ESPECÍFICA Y ACTUANDO BAJO LOS PRINCIPIOS DE INCLUSIÓN Y ATENCIÓN A TODAS LAS PERSONAS.
Autor: Dionisio Millán. Director del centro de Futuro Singular Córdoba en Castro del Río