Andrés es el miembro más reciente del patronato, aunque su vinculación con Futuro Singular Córdoba se remonta a 1981. Durante estos 40 años ha ejercicio varios cargos, jubilándose en 2021 como director del centro de Montilla.

Su compromiso e implicación con la fundación y con las personas con discapacidad intelectual, le motivan a seguir vinculado estrechamente con nosotros.

Andrés, después de 40 años vinculado a la Fundación, qué balance haces del progreso y evolución en cuanto a derechos y autodeterminación de las personas con discapacidad intelectual, desde entonces hasta ahora.

Creo que el avance experimentado en los últimos años, tanto en derechos como en autodeterminación ha sido importante, y es evidente. Es evidente y no ha sido casualidad, si no que ha sido fruto de haber identificado la importancia de estos conceptos y habernos puesto a trabajar en ellos:

Cuando hablamos de autodeterminación, estamos hablando de poder tomar decisiones de nuestras propias vidas, y esto es importante para todos, por supuesto, también para las personas con discapacidad intelectual.

Así es que, hemos incorporado estos principios a la misión, a la visión y a los valores de la fundación y se han asumido como paradigmas esenciales de nuestro trabajo.

Y no sólo autodeterminación, el concepto de calidad de vida, la teoría de los apoyos, el trabajo en la comunidad…lo hemos incorporado en nuestros Planes y Objetivos Estratégicos, creándose con ello los procesos y estructuras necesarias para su desarrollo.

Así, todos estos conceptos y paradigmas están ahora implícitos en todas y cada una de las actividades que se hacen en nuestra entidad:

Los Planes personales de Apoyo, los Grupos de Participación, los Grupos de Autogestores, procesos de Prevención de Vulneración de Derechos, el Comité de Ética…son sólo algunos ejemplos de las acciones que desarrollamos.

Creo que el cambio más importante en esos 40 años es que, antes, el modelo se centraba en el cuidado de las personas y su protección…pero sin contar con ellas. Se hacía según el criterio profesional, como entendíamos que era mejor para ellas. Ahora, prestamos los apoyos, pero son las personas con discapacidad intelectual quienes deciden. Su decisión marca los apoyos que prestamos.

Continuar como miembro del Patronato, te permite seguir trabajando por las personas con discapacidad, ¿Cuál consideras que son los nuevos y más importantes retos para abordar?

Para mí, antes Aprosub, ahora Futuro Singular Córdoba, ha sido una parte importante de mi vida. He estado 40 años compartiéndolo todo y una vez llegada mi jubilación mi deseo era seguir manteniendo este vínculo.

Si hablamos de reto personal, el mío es continuar estando a disposición de la entidad e intentar seguir mejorando la vida de las personas.

Si hablamos de reto desde la perspectiva del patronato y entidad, en estos momentos estamos trabajando en algo tan importante como el próximo Plan Estratégico. El Plan Estratégico define las líneas de trabajo para los próximos años. Y dos de las principales líneas que vamos a abordar son el empleo para personas con discapacidad y la vivienda en la comunidad.

Al hilo de lo que comentábamos antes, estos son dos aspectos fundamentales para mejorar la calidad de vida de las personas. De hecho, para cualquier persona con y sin discapacidad. El empleo y la vivienda ofrecen independencia y facilitan las relaciones sociales. Son de vital importancia para las personas a la que prestamos apoyo.

¿Cuáles consideras que son las principales dificultades a las que se enfrentan las entidades para seguir prestando los mejores apoyos?

A lo largo de los años, las dificultades han sido muchas y variadas.

Pero creo que las dificultades más importantes para poder afrontar nuestro trabajo siempre han sido las mismas y han venido de la mano de la Administracion. Precisamente de quienes tendrían que facilitarnos las cosas.

Los apoyos y recursos siempre han sido limitados e insuficientes.

Creo que, en todos estos años, lo que ha posibilitado que esto funcione ha sido contar con un gran equipo de profesionales, en todos los sectores.

Ha sido nuestra “mejor arma”.

Y, bueno, este último año, las dificultades han sido más que evidentes con la pandemia. La Covid-19 nos ha puesto a prueba. Ha hecho que nos tengamos que reinventar y cuestionarnos muchas cosas. Tuvimos que acostumbrarnos al teletrabajo, vimos como los medios eran más que insuficientes, tuvimos que limitar todas las actividades en la comunidad…

Inevitable preguntarte ¿Qué ha supuesto para ti entrar a formar parte del Patronato de Futuro Singular Córdoba tras 40 años trabajando en la entidad?

La verdad es que me llena de orgullo y satisfacción que hayan decidido contar conmigo para sumarme a este proyecto.

Entonces, Aprosub, me ofreció mi primer empleo y desde entonces he estado muy vinculado a la entidad. Ahora, en mi jubilación, no quería desconectar porque, además, confío plenamente en el trabajo que se está haciendo. Confío en este Patronato, en el Consejo de Dirección y en todos los profesionales.

Apuesto por lo que hemos creado y por lo que nos queda por hacer.

Sé que detrás hay un muy buen equipo de trabajo del que voy a intentar aprender.

Para mi ser patrono supone un reto. Un reto que me va a permitir vivir la organización desde una perspectiva diferente. Intentaré estar a la altura.