Natalia tiene 19 años y sólo llevaba un año en nuestro Programa de Transición a la Vida Adulta y Laboral en Castro del Río cuando le surgió la posibilidad de trabajar.

Y es que, en su Plan Personal de Apoyo, su objetivo de vida era precisamente, conseguir un puesto de trabajo.

Singular CEE le dio la oportunidad de trabajar en el Bar de la piscina de Castro del Río y en menos de un mes ha demostrado sus capacidades y habilidades para desempeñar su puesto. ¿La conocemos?

Natalia. ¿antes de entrar en el PTVAL de Castro del Río, dónde estudiabas?

Yo venía del IES Ategua de Castro del Río

¿Por qué decidiste cursar este Programa de Transición a la Vida Adulta y Laboral?

Porque no podía hacer 4º de la ESO y yo quería seguir estudiando.

La orientadora del instituto me dijo las posibilidades que tenía y me dio entrar aquí. (Centro de Futuro Singular Córdoba en Castro del Río).

A mí me gustaba el colegio (María Montessori de Castro del Río) porque me habían hablado de él y también lo conocía porque mi tío trabaja en el centro. Él también me animó.

Al principio me costaba hacer amigos, pero ahora no lo cambio por nada. Ya tengo un grupo de amigos y también tengo pareja. Estoy muy contenta

¿Tenías más o menos claro dónde querías trabajar?

Yo tenía claro que quería trabajar con niños pequeños al principio.

Pero ahora que estoy trabajando aquí me gusta y estoy muy contenta.

Si se acaba también me gustaría trabajar en limpieza.

¿Cómo recibiste la noticia del contrato de trabajo?

Me lo dijo Mª Dolores que es la psicóloga del centro. Me preguntó si me gustaría trabajar en el bar de la piscina de Castro del Río y me gustó mucho la idea.

¿Has contado con el apoyo de tu familia?

Mª Dolores llamó también a mi familia y a ellos también les gustó mucho la idea.

Me apoyan siempre mucho y a mí no me dio miedo en ningún momento.

¿Cuáles son tus principales apoyos?

Mi familia: mi madre y mi padre. Me apoyan para que tenga un buen trabajo, me animan a salir con mis amigos, aunque aquí en Castro del Río no tengo porque son todos de Carteya.  

Mis padres saben que tengo pareja y les parece bien. Al principio se lo conté a mi madre y me dijo que me llevara bien con él. Luego se lo conté a mi padre y me dijo lo mismo.  

En el bar, al principio me ayudaba Jose, el camarero. Ahora ya sé hacerlo yo sola todo.  

¿Qué funciones desempeñas?

Yo me encargo de la terraza. Sirvo las mesas, las recojo y las limpio. Por las mañanas las monto con los servilleteros, las cartas de menú, el aceite… y pongo las flores en las estanterías.  

¿Cómo te sientes?

Me siento contenta, satisfecha y orgullosa de mi trabajo.

Esto me ha servido para querer seguir trabajando porque la experiencia es muy buena.

¿Tienes algún mensaje que dar?

Primero a los empresarios y a las empresarias para que den oportunidades a las personas con discapacidad.

Nos tienen que dar la oportunidad de demostrar nuestras capacidades y nuestras habilidades.

También un mensaje a mi familia. Quiero darle las gracias porque me apoyan en todo.

Y también quiero darle las gracias al Centro Especial de Empleo por confiar en mí y darme la oportunidad de trabajar en el Bar de la Piscina. Estoy muy contenta.